Mejores calas de Mallorca para visitar en Semana Santa
Mejores calas de Mallorca para visitar en Semana Santa
Ahora que los días son más largos y el ambiente empieza a ser más agradable, la isla de Mallorca es una de las opciones favoritas de cualquier amante del mar para Semana Santa. Mallorca está repleta de rincones costeros para descubrir, donde podremos rodearnos de arenas blancas, rocas suaves, fuentes de barro e incluso costas montañosas, ¡es realmente un paraíso! Las calas son una opción particularmente atractiva, ya que en ellas podremos huir de las playas masificadas y disfrutar de aguas más limpias, una gran biodiversidad marina y una naturaleza más salvaje. Te proponemos algunas calas perfectas para esta temporada.
Es Trenc
Es Trenc se encuentra en la costa sur de Mallorca, entre Sa Rapita y Colonia de Sant Jordi. Con siete kilómetros de costa, arena blanca con superficies de hasta 35 metros de ancho. Lo que diferencia a esta playa de otros destinos es la ausencia de edificios y locales turísticos, así como la prohibición de los deportes acuáticos, gracias a la congelación absoluta impuesta por el gobierno de la isla hace unos años. Cuenta también con una gran variedad de especies de aves autóctonas que viven en los humedales de la playa. La opción perfecta para un día disfrutando de la naturaleza en su máximo esplendor.
Cala Fornells
En la costa suroeste de Mallorca, en Peguera, Calviá, Cala Fornells es una encantadora cala con manchas de arena, piedra y rocas que la hacen atractiva para amantes de todos los tipos de costa. Encontraremos alrededor una gran variedad de restaurantes y zonas de ocio, así que podremos cubrir todas nuestras necesidades con facilidad. Sin embargo, podremos encontrar zonas verdes que nos permitirán encontrar algo de sombra natural. A destacar su paseo litoral, que la conecta con playas vecinas como el Caló de ses Llises y el Caló d'es Monjo.
Cala Llombards
Cala Llombards se encuentra en el municipio de Santanyí y es una playa a la que se puede acceder fácilmente en coche. La cala cuenta con varias zonas rocosas, ¡aquí encontraremos algunos saltos para los más valientes! Además de un mirador, cerca encontraremos 'Es Pontàs', uno de los monumentos naturales más emblemáticos de Mallorca, que se asemeja a un puente que se eleva desde el mar.
Playa de Formentor
Recomendación en el norte de la isla, cerca del Cap de Formentor, el punto más septentrional de la isla, donde se alza un pintoresco faro que podremos contemplar desde la misma playa. En los días despejados, se puede divisar la isla de Menorca. Cerca de un kilómetro de playa rodeada de pinares, donde es fácil encontrar sombra para resguardarse del sol y el calor. Además, ¡también tendremos vistas a la sierra de Tramuntana!
Caló des Moro
Caló d'es Moro se encuentra muy cerca de Cala Llombards, a 6km de Santanyí. Es una cala pequeña, escondida entre dos pequeños acantilados. Por eso tiene un acceso complicado: a través de una escalera de piedra que no está en su mejor estado. Es una de las calas más populares de esta parte de la isla, por lo que se recomienda llegar temprano para encontrar un buen sitio. Eso sí, al ser pequeña, es un espacio en el que podrás controlar a los más pequeños con facilidad.
En el Santa Clara Urban Hotel & Spa podrás descansar tras una jornada en alguna de las maravillosas calas de la isla. Situado en pleno casco antiguo, a solo 5 minutos de la Catedral de Mallorca, es el lugar perfecto para poder pasear por la ciudad y entrar en contacto con la cultura y gastronomía mallorquina.
Es Trenc
Es Trenc se encuentra en la costa sur de Mallorca, entre Sa Rapita y Colonia de Sant Jordi. Con siete kilómetros de costa, arena blanca con superficies de hasta 35 metros de ancho. Lo que diferencia a esta playa de otros destinos es la ausencia de edificios y locales turísticos, así como la prohibición de los deportes acuáticos, gracias a la congelación absoluta impuesta por el gobierno de la isla hace unos años. Cuenta también con una gran variedad de especies de aves autóctonas que viven en los humedales de la playa. La opción perfecta para un día disfrutando de la naturaleza en su máximo esplendor.
Cala Fornells
En la costa suroeste de Mallorca, en Peguera, Calviá, Cala Fornells es una encantadora cala con manchas de arena, piedra y rocas que la hacen atractiva para amantes de todos los tipos de costa. Encontraremos alrededor una gran variedad de restaurantes y zonas de ocio, así que podremos cubrir todas nuestras necesidades con facilidad. Sin embargo, podremos encontrar zonas verdes que nos permitirán encontrar algo de sombra natural. A destacar su paseo litoral, que la conecta con playas vecinas como el Caló de ses Llises y el Caló d'es Monjo.
Cala Llombards
Cala Llombards se encuentra en el municipio de Santanyí y es una playa a la que se puede acceder fácilmente en coche. La cala cuenta con varias zonas rocosas, ¡aquí encontraremos algunos saltos para los más valientes! Además de un mirador, cerca encontraremos 'Es Pontàs', uno de los monumentos naturales más emblemáticos de Mallorca, que se asemeja a un puente que se eleva desde el mar.
Playa de Formentor
Recomendación en el norte de la isla, cerca del Cap de Formentor, el punto más septentrional de la isla, donde se alza un pintoresco faro que podremos contemplar desde la misma playa. En los días despejados, se puede divisar la isla de Menorca. Cerca de un kilómetro de playa rodeada de pinares, donde es fácil encontrar sombra para resguardarse del sol y el calor. Además, ¡también tendremos vistas a la sierra de Tramuntana!
Caló des Moro
Caló d'es Moro se encuentra muy cerca de Cala Llombards, a 6km de Santanyí. Es una cala pequeña, escondida entre dos pequeños acantilados. Por eso tiene un acceso complicado: a través de una escalera de piedra que no está en su mejor estado. Es una de las calas más populares de esta parte de la isla, por lo que se recomienda llegar temprano para encontrar un buen sitio. Eso sí, al ser pequeña, es un espacio en el que podrás controlar a los más pequeños con facilidad.
En el Santa Clara Urban Hotel & Spa podrás descansar tras una jornada en alguna de las maravillosas calas de la isla. Situado en pleno casco antiguo, a solo 5 minutos de la Catedral de Mallorca, es el lugar perfecto para poder pasear por la ciudad y entrar en contacto con la cultura y gastronomía mallorquina.